domingo, 27 de septiembre de 2009

CASA ASTROLOGICA VII


Sus significados son: matrimonio, divorcio, fidelidad o infidelidad conyugal, las asociaciones, los enemigos abiertos o declarados, los pleitos con la justicia, los contratos, la personalidad del cónyuge, los rivales sociales, las uniones legales, las relaciones bajo contrato, el hogar conyugal, la felicidad matrimonial, las facilidades o dificultades para la realización del matrimonio, la posible viudedad o la enfermedad del cónyuge, la fundación o disolución de una sociedad, el grado de armonía y comunicación en el hogar conyugal, el deseo o no de establecer relaciones duraderas y legalizadas, el concepto ideal de matrimonio, la complementación o no con el cónyuge, la ganancia o la pérdida de los procesos legales, la soltería, etc.

ANALOGIAS ESENCIALES:

Matrimonio, divorcio, asociaciones, enemigos declarados y pleitos legales.

SIGNIFICADO ESOTERICO:

En esta casa encontramos a los personajes que se unen y complementan totalmente al yo del interpretado y, por otra parte, a los que se oponen frontalmente a su ego, cabiendo la posibilidad de que una persona pasara de una situación a la otra con respecto al interpretado. La armonía y la desarmonía, el equilibrio y el desequilibrio, la formalización de un contrato y la ruptura del mismo, el matrimonio y el divorcio, etc., se estudian en la casa VII. Ella nos dice si tales uniones resultan o no afortunadas. En la casa VII se puede encontrar el apoyo y complemento perfecto para el ser humano o su enemigo más abierto.


La CASA SEPTIMA se relaciona con el signo de la Balanza, el cual a su vez posee conexiones con los siguientes factores cosmopsicológicos: el elemento aire, la cualidad cardinal, las casas de las relaciones, las casas de la iniciativa, Venus como regente nocturno, Saturno en exaltación, Marte en exilio y el Sol en caída.

Los atributos de la casa VII son fundamentalmente aquellos que significan una expansión del yo al buscar un complemento a sí mismo. De ahí, que esta casa terrestre se relaciona con el matrimonio, al igual que con la ruptura de éste, es decir, separación o divorcio; con las asociaciones y los socios, siempre que se pongan intereses en común; y, como una polarización muy fuerte, también este sector terrestre afina con los enemigos declarados, los pleitos, la justicia, etc.

Asombrosamente, algunas de las causas de enemistades y pleitos más duros son los que fueron cónyuges o socios en otro tiempo.

Parece que el ser humano pasa de Venus a Marte, es decir, del amor al odio, con demasiada facilidad.

Con respecto a la regencia nocturna de Venus, no es difícil entender que ésta se conecta con la necesidad de un verdadero amor que viene desde dentro para que los asuntos de la casa VII vayan correctamente. Por ello, una asociación de tipo comercial con personas con las que no haya relaciones de fuerte sintonía, son más el origen de quebraderos de cabeza que cualquier otra cosa. Esto es así ya que Marte hace pronta aparición desde que encuentra hueco.

Marte dinamiza todos los aspectos relacionados con la casa VII, pero no olvidemos que es el planeta de la agresividad, la cual es la mejor forma de romper bruscamente un tratado, un acuerdo o, sencillamente una confianza depositada. Por ello, el control de este instinto se hace imprescindible en cuanto a lo que es el matrimonio o la relación con los asociados.

La caída del Sol en este sector aporta detalles interesantes. Más que nada, se refiere al hecho del posible peligro de perder parte de la individualidad propia al entrar en relación profunda con otra persona. Pero el astro solar dice que la base precisamente de una relación de dependencia enriquecedora, es la aportación por parte de cada miembro de la pareja o de la asociación, de lo mejor de sí mismo.

Saturno es el que se encuentra en exaltación en este sector siete, por lo que la voluntad y la responsabilidad de nuevo hacen su aparición en el escenario, al igual que la posible mezquindad en las maneras de actuar y pensar. La rigidez, el excesivo control debido a las desconfianzas, y las rutinas, son elementos que hacen sucumbir, y con razón, la dulce melodía de Venus.

No hay comentarios:

Publicar un comentario